Después de todo, ya le habíamos dicho al rey que «la mano protectora de nuestro Dios está sobre todos los que lo adoran, pero su enojo feroz se desata contra quienes lo abandonan.
Oremos por los trabajos de la Iglesia.
Pastor Alfredo Serrano
Después de todo, ya le habíamos dicho al rey que «la mano protectora de nuestro Dios está sobre todos los que lo adoran, pero su enojo feroz se desata contra quienes lo abandonan.
Oremos por los trabajos de la Iglesia.
Pastor Alfredo Serrano